Consultor en seguridad doméstica

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¿Por qué?

Los percances en las casas son la segunda causa de muerte infantil a nivel mundial, luego de los accidentes viales. De acuerdo con la Secretaría de Educación Pública en el Distrito Federal el envenenamiento, las quemaduras, las heridas, las fracturas y luxaciones y la obstrucción de la respiración son las principales lesiones que atacan a los niños.

Autoridades en el tema, como el Consejo Nacional para la Prevención de Accidentes (Conapra), coinciden en que la mayoría de los accidentes podrían prevenirse siempre y cuando se tomen las medidas adecuadas. Sólo así se evitará en los más pequeños del hogar molestias, dolor, discapacidad (temporal o permanente) e incluso, la muerte.

Una idea de negocio para quienes cuentan con estudios en arquitectura o ingeniería civil y experiencia con carpinteros, plomeros, herreros y electricistas es brindar consultoría en seguridad doméstica. A partir de una auditoría que señale los peligros más inmediatos para los niños en casa, se procederá a hacer las modificaciones correspondientes en el inmueble.

¿Cómo? Ofrece tus servicios como especialista en seguridad doméstica en aquellos lugares con alta concentración infantil como escuelas, empresas, salones de fiestas, parques y centros de entretenimiento. Apóyate en folletería con un diseño que refleje formalidad y profesionalismo y no olvides explicar en qué consiste tu oferta –recuerda que el cliente no compra problemas, sino soluciones–.

Una vez que hayas detectado los lugares e instalaciones que podrían provocar una lesión en niños, deberás entregar un presupuesto al cliente que incluya costos del material, arreglos y contratación de personal calificado. Para tener una idea de cuánto cobrar, haz un sondeo en el mercado; esto te permitirá tasar tu servicio de manera correcta.

Y como brindarás un producto terminado (en este caso, las modificaciones) lo recomendable es que te des de alta ante Hacienda como Persona Física con Actividad Empresarial pues así podrás dar facturas.

Fuente: https://www.entrepreneur.com/article/291588